Río Guatapurí en cuyo cauce proyectan la construcción de la represa Los Besotes. Vista del punto denominado Balneario Hurtado en Valledupar.
Foto: William De Ávila Rodríguez.
Según se expuso en el Concejo de Valledupar, los indígenas están solicitando la ampliación del resguardo indígena para englobar a los cuatro predios que están en la zona, lo que le daría otra connotación a esa área ya que se convertiría en resguardo.
Desde hace dos meses y medio, el municipio de Valledupar contrató a Armando Cuello, quien fue diputado de La Guajira y participó en el proceso por medio del cual se logró la construcción de la represa del río Ranchería, para que dinamice el proceso que permita la construcción de la represa Los Besotes.
El funcionario, que está laborando con Planeación Municipal, expuso en el Concejo de Valledupar el estado actual del proyecto de construcción de la represa de Los Besotes, que estaría ubicada en el cauce del río Guatapurí, en la parte media de la cuenca de este río, en zona ambiental protegida.
Hasta el momento no se ha definido la concertación con los indígenas que habitan esa zona como son los arhuacos, arzarios, koguis y kankuamos, para la construcción de la obra, ya que es requisito previo para la expedición de la licencia ambiental.
Sobre este punto hubo un amplio debate, en el que participaron los concejales, algunos de los cuales dijeron que si no se podía concertar, el Municipio de Valledupar debía acudir a acciones judiciales para lograr que se aprobara la licencia ambiental.
Más de mil firmas están recogidas para proponer un cabildo abierto para que la comunidad pueda pronunciarse sobre el proyecto multipropósito los Besotes.
Una de las inquietudes que se planteo fue averiguar sobre si existen los estudios sísmicos para este proyecto.
Un total de 15 predios están ocupados en el área donde se construiría la represa: seis privados, dos del Municipio, tres del Incoder y cuatro de grupos indígenas.
Aportes
También se estableció que el Gobierno Nacional se comprometió en aportar el 70 por ciento de los recursos, mientras que el departamento del Cesar aportaría el 20 por ciento y el Municipio de Valledupar el diez por ciento.
La obra está proyectada con una inversión de 400 mil millones de pesos, en un área de 169 hectáreas que no son zona de resguardo indígena sino de reserva forestal.
En la exposición de este tema estuvo presente el congresista José Alfredo Gnecco, quien dijo que junto a otros congresistas ha dialogado con el presidente de la República, Juan Manuel Santos, sobre este tema y el Gobernante manifestó su interés en que la obra sea una realidad. Se mostró partidario de tener un diálogo de concertación con los indígenas.
Opinan los concejales
Rafael Arrieta
“A este proyecto le ha faltado gobierno. Me refiero a todos los que han tenido mandato en el municipio, el departamento y a los congresistas, quienes no han hecho nunca equipo para sacar adelante esta iniciativa. No ha existido la voluntad política ni la convicción de que la represa es una necesidad”.
César Acuña
De 17 requisitos que se exigen para otorgar la licencia ambiental se han cumplido 16, sólo falta la concertación con los indígenas, por eso hay que analizar cuáles son las opciones judiciales que se pueden adelantar.
Leonardo Maya Amaya
“Lo preocupante de esta situación es que el Municipio también debe aportar 40 mil millones de pesos y ese recurso no existe en la actualidad, ya que se han venido pignorando los recursos del Municipio desde hace varios gobiernos”.
WILLIAM DE ÁVILA RODRÍGUEZ
Periodista
Periodista
Publicado originalmente en el diario Vanguardia Valledupar.
24 de octubre 2010
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